Por Cynthia Morales García
“Honestidad es no engañarnos ni justificarnos a nosotros mismos, nosotros sabemos lo que está bien, lo que está mal está mal” Camila, 12 años.
La semana pasada me tocó participar dentro de la clase de valores en el colegio de mis hijos, hablaría sobre honestidad a los niños de cuarto, quinto y sexto de primaria. Preparé un par de diapositivas, la definición, un par de ejemplos y una actividad. No las usé, no fueron necesarios.
Me sorprendió que los niños entienden perfectamente el concepto de honestidad, me comentaban que honestidad, es decir la verdad, es no engañar, es ser respetuoso e incluso delicado para expresarse, aquí fue cuando comprendí que la honestidad se practica, se vive, la honestidad es una elección cotidiana. Así me lo planteó Josh de 11 años: “ es como cuando juego fútbol, no siempre lo hago bien, pero mis amigos siempre me dicen que será la próxima vez”. Los niños eligen ser honestos, reconocen que su compañero requiere más práctica, hay honestidad, pero ser honesto no nos brinda derecho para lastimar al otro con insultos o reproches, la honestidad nos regala una oportunidad de ayudar al otro en aquello que puede mejorar, en este caso el fútbol. Los adultos y también los niños explotamos cuando algo no sale como esperamos, la frustración, el miedo a equivocarnos surge en forma de gritos, manoteos, desesperación y hasta berrinches, aquí tiene cabida la autoregulación, el control emocional, la madurez y la honestidad con nosotros mismos.
Después Emily de sexto me sorprendió: “Ser honesto significa decir las cosas bien para no herir los sentimientos del otro, hay que decirlo bonito”. Los niños no sólo saben de honestidad, entienden y respetan los sentimientos del otro, lo que los adultos llamamos empatía ellos lo llaman “no lastimar al otro”.
Para finalizar mi clase, les pedí a los chic@s que se organizarán en equipos por grado y entre todos hicieran lo que llame “un Pacto de Honestidad”. Les pedí que como salón lograran un par de acuerdos para ser honestos, a lo que Alex de 10 me dice: “algo así como que quinto se compromete a…” Exactamente, le contesté. ¿Te das cuenta? Yo no hablé de compromisos, ni de empatía, ni asertividad o de respeto; los niñ@s perciben los valores sólo requieren darles el nombre como tal, los niñ@s en su nobleza reconocen el valor del otro y eso hay que aplaudirles, reforzar su autoestima, su dignidad personal, etc.
Aquí los acuerdos por grado:
4to: Nos comprometos a ser honestos en las buenas y en las malas
5to: Nos comprometemos a no pelear en el fútbol
6to: Nos comprometemos a ser honestos con nosotros mismos y no engañarnos
Los acuerdos de los niñ@s me parecen brillantes, se comprometen a ser honestos bajo toda circunstancia, cuidemos de hacer nosotros lo mismo. Me encantó el compromiso del fútbol, se comprometen a la no violencia, a mantener la paz, a usar diálogo, quizás no lo dicen con estas palabras, pero la intención es la clave, aquí reside nuestro trabajo como educadores, padres de familia, entrenadores, en darle las herramientas a los niños para que en su día a día logren desarrollar valores que los conviertan en grandes personas. Fui en mi papel de maestra y salí como alumna; los niñ@s me regalaron grandes lecciones, la primera la honestidad empieza contigo mismo, la segunda: honestidad significa respeto y empatía para el otro.
Les pedí a los maestros que el Pacto de Honestidad se quedará en salón como un recordatorio, ya que les pediré que me vuelvan a invitar para que me digan como les fue en sus compromisos, espero mucha honestidad de su parte. Te compartiré mis descubrimientos.
La honestidad es uno de los pilares de la cultura de la legalidad, honestidad significa reconocer mis derechos y ejercer mis obligaciones. Ser honesto significa olvidarse de hacerse de la vista gorda, significa comprometerse a votar, a seguir las reglas de tránsito, a respetar la ley.
Pequeñ@s Ciudadan@s es una plataforma educativa pionera en promover la cultura de la legalidad en los niñ@s de primaria. Te invitamos a conocer más sobre nuestras actividades para que juntos formemos Pequeñ@s Ciudadan@s.
Te invitamos a compartir esta información en tus redes y si te gustaría aplicar con tus alumn@s, hij@s o compañer@s el “pacto de honestidad” con gusto te compartimos la actividad.